Monumento de los más destacables ante los ojos de turistas y habitantes, son “Las Tarascas”, que hoy forman parte importante de la historia de Morelia Mich; la ciudad donde se encuentran.
Esta fuente resultó ser un peculiar regalo, en el año de 1937, para el General Lázaro Cárdenas del Rio, ya que se sabía era gran admirador de la belleza indígena, tal presente fue colocado frente a su casa, que ahora es el edificio que ocupan las instalaciones del IMJU (Instituto Michoacano de la Juventud), la mayor parte de los ciudadanos se maravilló ante tal monumento, sin embargo, incomodó a varias personas, por mostrar el torso desnudo, pero con el paso del tiempo se fueron acostumbrado a la belleza de esta fuente.
Después de mucho tiempo de haber formado parte fundamental de la decoración de la ciudad, se cuenta que en el año de 1967, la esposa del ex gobernador del estado Agustín Arriaga Rivera, pidió las retiraran, pues consideraba indignante estuvieran desnudas, contrario al rumor sobre el hecho de haber sido enviadas a España, “Las Tarascas” originales (a color) se trasladaron a las antiguas instalaciones de la feria, y en su lugar se colocó la fuente que hoy conocemos como “El huarache”, sin embargo, duro poco tiempo ya que la gente pedía fueran devueltas a su lugar de origen, es así que en el año de 1968, el gobierno del estado tomó la decisión de edificar una réplica exacta de bronce, la cual gustó aún más que las originales.
“Las Tarascas” representan a tres de las más importantes princesas de la cultura purépecha: Atzimba, Tzetzangari y Erendira, la cesta de frutas simboliza la abundancia, los caracoles que se encuentran en la base, representan al hombre y la conjunción de todos estos ornamentos aluden a la fertilidad, esta polémica fuente forma parte de la cultura, vida e historia de nuestra Morelia y nos invita a conocer y disfrutar la ciudad desde el centro de su corazón.
Así que piénsalo y este fin de semana visita ““Las Tarascas” fuente de las princesas de la cultura purépecha.