El «Espejo de los dioses»
Rodeado por pequeños sitios de artesanías locales y varios restaurantes rústicos; algunos de ellos soportados por pilotes a la orilla del lago. Encontramos al Lago de Zirahuén, que en purépecha significa «espejo de los dioses».
Es un lago montañoso, que forma parte de la cuenca Lerma-Chapala donde existen varios lugares donde podrás rentar cabañas y hospedarte un fin de semana placentero en compañía de tu familia.
Se localiza en la porción centro–norte del estado de Michoacán. Tiene dos muelles principales que dan acceso al Lago. La entrada está al centro del pueblo donde se encuentra la parroquia, dedicada al Señor del Perdón, que conserva el estilo arquitectónico que prevalece en toda la región desde la llegada de los primeros misioneros.
Cuenta la leyenda que, a la llegada de los españoles a Michoacán, un capitán se enamoró de Eréndira, la hermosa hija de Tangaxoan, Rey de los purépechas; la raptó y la escondió en un precioso valle rodeado de montañas. La princesa, erguida sobre una roca implorando a sus dioses del día y de la noche, Juriata y Járatanga, le enviaron un torrente de lágrimas con las que formó un gran lago al que se arrojó, convirtiéndola los hechiceros en sirena para que no muriera ahogada.
Dicen que la sirena aún vaga por esas aguas y que en las primeras horas de la madrugada surge del fondo para encantar a los hombres malos, los ahoga y les arranca el corazón, colgando éstos en el borde de la balsa, en agravio de quienes no saben conquistar con amor y reniegan del curso de la historia.
Así que este fin de semana piénsalo y visita el «Espejo de los dioses».
Redacción 0limites.mx
