Saltillo, Coahuila. 7 de septiembre de 2018.- Yacimientos petroleros que se consideran agotados en la actualidad, en realidad aún cuentan con hasta 50 por ciento del crudo en su interior. Para obtener este petróleo rezagado, es necesaria una tercera etapa de explotación del hidrocarburo denominada recuperación asistida, un proceso complejo y costoso.
Ante este panorama y con la finalidad de aprovechar el crudo incrustado en diferentes pozos olvidados, especialistas del Departamento de Procesos de Polimerización del Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA) desarrollan materiales poliméricos para fomentar la recuperación asistida de petróleo de forma eficiente y con un costo más accesible.
La producción de petróleo crudo en México ha caído en los últimos años, de acuerdo con datos del Sistema de Información Energética de la Secretaría de Energía. En mayo de 2014, la producción de petróleo crudo fue de dos millones 489 mil 745 barriles diarios, en el mismo mes de 2016, la producción cayó a dos millones 174 mil 478 barriles por día, y en mayo del presente año la producción fue de un millón 867 mil 414 barriles diarios.
Ante la baja en la producción del hidrocarburo en México, el proyecto de Materiales poliméricos para la recuperación asistida de petróleo del CIQA representa una alternativa para impulsar el sector energético y aprovechar gran cantidad de petróleo varado en pozos abandonados del país.
¿Qué es la recuperación asistida de petróleo?
El proceso de extracción de petróleo de cualquier yacimiento o pozo se divide en tres etapas. En la primera etapa, se emplea agua y la presión del pozo para la explotación del crudo. Durante la segunda etapa, la presión del yacimiento (también conocido como depósito petrolífero) es insuficiente y es necesario ‘inyectar’ otros elementos como hidrógeno (H) y gases como dióxido de carbono (CO2) para bombear y obtener el hidrocarburo que queda incrustado en el yacimiento. Al finalizar esta etapa, usualmente se considera que un pozo está agotado y termina la extracción de petróleo.
Sin embargo, existe una tercera etapa denominada recuperación asistida de petróleo, donde se aplican diversos materiales, elementos y procesos para empujar el crudo incrustado en rocas del yacimiento. Este crudo rezagado llega a representar hasta 50 por ciento del petróleo que contiene el depósito petrolífero.
«Se aplica la tercera etapa que es la recuperación asistida, consiste en diferentes aplicaciones, puede ser aplicar polímeros, combustión in situ o empleando catalizador o surfactante. Nosotros estamos trabajando en polímeros para recuperación de petróleo en la tercera etapa”, comentó el doctor Claude St. Thomas, investigador Catedrático Conacyt adscrito al Departamento de Procesos de Polimerización del CIQA.
Fuente: Agencia Informativa Conacyt