3 de septiembre de 2018.- Originario de Ecatepec; Samuel Segura Moreno. Pareciera un joven más que camina sobre la acera, pero con su segunda novela, “Maldito sea tu nombre”, el alumno de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM obtuvo el Premio de Novela Juvenil “Universo de Letras 2018”, certamen convocado por la Coordinación de Difusión Cultural (CDC) de la UNAM y el Fondo de Cultura Económica (FCE).
Samuel siempre trae algo entre manos: el golpeteo “cincelado” del teclado Qwerty, la pluma caligráfica o un par de baquetas que ejecuta veloz en el estruendo de su hipotálamo; todo eso lo refrenda afortunado en la escritura, porque al final del día dice que “los metaleros son como cualquier otra persona”.
Esa inclinación musical lo hizo idear la historia de una chica baterista en una banda de death metal, por la que será distinguido en la edición 2018 de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, la reunión editorial más importante de Iberoamérica, además de que será publicada su obra.
“Existe un prejuicio de que el metalero (aficionado a diversas corrientes del género metal: heavy, trash, death…) no expresa sus afectos; a eso me he enfrentado, incluso cuando di a leer la novela a varios colegas, no percibían que el personaje tuviera sensibilidad literaria, por eso incluí fragmentos reales de canciones de bandas como Slayer, de las más brutales: hay frialdad en las letras, las frases están llenas de odio, pero también de pasión, honestidad y corazón”, comentó.
Death metal literario
“¿Cuál es el vaso comunicante entre el death metal y la literatura?, fue una de las preguntas que me hice cuando empecé a escribir ‘Maldito sea tu nombre’, título que surgió de la letra de una canción de un grupo español, que si bien no toca death metal, es emblemático para el rock en general”.
Samuel es baterista y letrista de la banda Asedio, con la que lleva más de 13 años y tres discos grabados; de ahí decidió llevar lo estridente del rock a la literatura. A su novela le invirtió tres años, la última parte fue apoyada por el también músico Armando Vega Gil, en su taller literario.
“Había que reflejar la potencia de una banda de death metal en la hechura, que fuera lo más cercano a esa energía y brutalidad que desprende este género, que no fuera una novela tibia”, detalló.
Si no tocara en una banda como Asedio, no habría podido escribir este libro, reconoció el universitario. “Ha significado mucho sacrificio, voy doblemente en contrasentido porque toco metal mexicano y escribo literatura; he tenido que luchar, dejar algunas cosas, como la ‘comodidad’ de una vida común.
“Mi deseo ahora es cursar una maestría en Documental, en el CUEC; el proyecto sería sobre la banda mexicana Transmetal, que ya les planteé y están entusiastas con la idea”, concluyó.
Índice
Samuel es pasante de la licenciatura en Ciencias de la Comunicación de la FCPyS de la UNAM. Desde 2016 estudia Guion Cinematográfico, en el Centro de Capacitación Cinematográfica.
En 2012 recibió el Premio Nacional de Novela Corta de Humor en su primera edición, convocado por el Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes, por la obra “El Sufrimiento de un hombre calvo”. Meses antes, le fue conferido el Octavo Premio Nacional Rostros de la Discriminación “Gilberto Rincón Gallardo”, en la categoría de Crónica en Medios Impresos y/o Internet, por el texto “Viaje al ritmo de un perreo”, publicado en el medio de comunicación Kaja Negra.
Samuel encabeza “Narrativa”, sello editorial que arrancó con la publicación “Cada monstruo tiene su debilidad”, con 14 relatos de su autoría, que trabajó con el escritor Eusebio Ruvalcaba, su mentor, que ahora lo edita entre nubes.
Fuente: dgcs.unam.mx