A 5 de febrero de 2019.-La configuración de nuestra Constitución tal como la conocemos deviene de un proceso histórico que es resultado de demandas y revoluciones sociales.
Tras la llegada de Porfirio Díaz al poder y su permanencia en la presidencia por más de treinta años, se desató un levantamiento social que se oponía a su dictadura y que dio a luz a la Revolución. Con la promulgación del Plan de San Luis despertó el movimiento armado que buscaba derrocar su mandato y que explotó el 20 de Noviembre de 1910. Ante el estallido social y la inminente derrota, en mayo 1911 el presidente Díaz presentó su renuncia y se exilió en Francia.
En octubre 1911 se realizaron elecciones y resultó vencedor Francisco I. Madero; fue traicionado mediante un golpe de Estado orquestado por el general Victoriano Huerta y asesinado junto al vicepresidente José María Pino Suárez en febrero 1913.
Venustiano Carranza desconoció la presidencia del llamado usurpador y lo derrocó con el Ejército Constitucionalista, un movimiento armado de la Revolución. Al convertirse en titular del Poder Ejecutivo convocó a la creación del Congreso Constituyente de Querétaro para reformar la Constitución de 1857, la cual había sido modificada en múltiples ocasiones por el gobierno de Díaz para adaptarla a su proyecto de nación, entre estas modificaciones se encuentra la reelección y la ampliación del periodo presidencial.
Así fue acuñada la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917, la cual está vigente y se conforma por 136 artículos. En ella se recogieron demandas de los grupos que se levantaron en armas durante la Revolución. Además de incluir los “derechos del hombre”, se abordaron los “derechos sociales”, se decreta la no reelección, se ratifica la soberanía y la organización federal, se instauran la libertad de culto y de expresión y la enseñanza laica y gratuita.
Constitución de 1857
Con Antonio López de Santa Anna como presidente de México surgió un movimiento encabezado por Juan N. Álvarez e Ignacio Comonfort que se opuso a su mandato debido a su centralismo y forma de ejercer el poder de manera dictatorial.
Cuando Santa Anna abandonó el país en 1855 tras la inevitable revolución, Álvarez asumió la presidencia interina y Comonfort fue nombrado ministro de Guerra.
Se convocó a elecciones en 1856 para conformar un Congreso Constitucional, pues se aseguraba que era necesaria una nueva constitución para restablecer la República Federal y proclamar las garantías individuales, ya que durante el mandato de Santa Anna se publicó un marcó normativo que sostenía su dictadura.
Como resultado de este congreso, fue promulgada la Constitución Política de la República Mexicana de 1857. En ella se prohíbe la esclavitud, se expresan los deberes y obligaciones de los mexicanos, se establece que la soberanía reside en el pueblo y se reconoce el derecho de asociación y de reunión.
Constitución de 1824
Al cesar la guerra de Independencia en 1821, se conformó en México un gobierno monárquico que tendría independencia de los españoles. Se instauró el Primer Congreso Constituyente, de cuyas sesiones resultó nombrado Agustín de Iturbide como emperador de México, en mayo de 1822.
Ante la presión para restituir el Congreso Constituyente, el cual fue disuelto por Iturbide para crear un órgano que emitió un proyecto que desconocía la Constitución de Cádiz e instauraba la independencia de la nación mexicana, el emperador convocó a una asamblea.
Como resultado de este Segundo Congreso Constituyente se promulgó el Acta Constitutiva de la Federación Mexicana, la cual establecía la República Federal como forma de gobierno y abría paso a la promulgación de una constitución.
Así fue creada la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos de 1824, cuyos principales mandatos definían al país como República Federal Representativa, le daban el nombre de Estados Unidos Mexicanos y posicionaban al catolicismo como la única religión.
En este documento se establece la división de poderes, se instaura la libertad de imprenta, se integra la figura de vicepresidente y se establece un periodo de poder presidencial de cuatro años.
Constitución de Apatzingán
Debido a la invasión francesa y la abdicación de Carlos IV y Fernando VII como consecuencia de ésta, un grupo conocido como los Insurgentes, entre ellos Miguel Hidalgo y Costilla, Ignacio Allende y José María Morelos y Pavón, iniciaron la promoción de la independencia de la Nueva España del Imperio Español, grito libertario que retumbaría en septiembre de 1810.
En 1813 los Insurgentes convocaron al Congreso de Anáhuac en Chilpancingo, donde se declaró la independencia de la Nueva España. Para octubre de 1814, cuando el congreso tuvo que trasladarse a Apatzingán, se promulgó el Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana, conocido también como la Constitución de Apatzingán.
Este texto constitucional, inspirado en Los Sentimientos de la Nación que Morelos leyó en la sesión fundacional del Congreso de Chilpancingo, se conoce como el primer precedente de nuestra constitución. Pues aunque nunca fue aplicada, en ella se abolió la esclavitud y se consideró a todas las personas iguales ante la ley.